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COMPOSICIÓN SOBRE SAN MARTÍN.  Título: La carta de Remedios

 Boulogne Sur Mer, Junio de 1848

Están Merceditas y San Martín instalándose en el nuevo hogar de Don José, cuando Merceditas encuentra una pequeña caja que parece contener unos papeles.

- Papá, ¿esto es tuyo?

- No que yo recuerde.

- ¡Qué raro! voy a abrirla. ¡Aquí hay una carta para ti!

- ¿A ver? – Comenta San Martín sorprendido.

- ¡Si! ¡Es de mamá!

- ¡Que alegría! ¿Podés leerla vos que mi vista ya está muy deteriorada?

- ¡Claro!

                                                                                                   Buenos Aires, 1 de agosto de 1823

 Querido José:

“No sé por dónde empezar, no me alcanzan las palabras para decirte cuánto te quiero. Desde que nos conocimos siempre fuiste una persona muy importante para mí; por tu humildad, solidaridad, sinceridad, nunca me faltaste el respeto.

Lograste varios objetivos en tu vida:  el Cruce de los Andes con el objetivo de liberar Argentina, Chile y Perú; ya sabía que ibas a lograr todo lo que te propusieras desde que te fuiste a la guerra y seguro que te preguntarás por qué. Porque eres un excelente estratega, un ejemplo a seguir para muchas personas luchadoras de este mundo. Lo que más admiro de ti es que eres muy respetuoso con las mujeres y con los niños, has ayudado a los más necesitados, creaste escuelas, entre otras cosas maravillosas.

 Espero que sigas cumpliendo todas las metas que te propongas, y no permitas que una úlcera estomacal u otras enfermedades te detengan, sigue adelante a pesar de las dificultades que puedas enfrentar en tu camino.

Te escribo esta carta porque no tuve la oportunidad de despedirme personalmente. Ojalá que Merceditas no sea tan despistada y se acuerde de entregarte esta carta. Un abrazo muy grande, tu esposa que te amará siempre”

- Qué hermosa carta que ha escrito mamá. ¡Claro! Ahora que lo estoy pensando, ella sí me había entregado esta carta, pero se ve que me olvidé de dártela cuando nos vinimos para Europa. Que emoción haberla encontrado y que puedas conservar algo de ella.

- Está bien hija, ahora me siento mucho mejor. Si no hubiera sido por los problemas políticos, hubiera podido despedirme de Remedios. Ojalá que se solucionen los problemas en la Argentina, mientras tanto yo me quedo con este pequeño regalo aquí en Francia.

Cuento "Hilos invisibles